Nunca digo "adiós" y siempre me despido con un "hasta luego" o "hasta pronto" porque eso hace referencia a un próximo encuentro. Tampoco suelo decir "siempre" porque esa palabra no existe, no habrá algo en esta vida que dure eternamente. Y mucho menos hablar con un "nunca" en una frase, no es lo mío. No hay nada imposible , podrá haber ciertas cosas que sean improbables pero no por ello me voy a rendir y voy a decir que "nunca lo conseguiré" pues no, yo prefiero intentarlo y ser feliz por haberlo conseguido o por lo menos por haberlo intentado.
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